Cuando mis hijos comenzaron a ir al cole, se encontraron con que el concepto de familia que ellos tenían no era el mismo para todo el mundo. En su clase había varios tipos de familias, compañeros suyos de clase que tenían dos mamás, un papá y una mamá pero que no vivían juntos… a día de hoy tienen amigos que no viven con sus papás y mamás biológicos, sino que viven con sus familias de acogida o adopción, pero todos tienen un denominador común, a todos les quieren sus familias.
Cuando conocí a Emma S. Varela hace unos meses, me enamoré de su cuento, Sofia y las familias de sus amigos. Forma parte de la colección Sofía, de la Editorial Nube de Papel y no puede ser más entrañable y respetuoso.
Emma establece una conexión entre los tipos de casas de sus amigos y sus familias. Cada casa es diferente a las demás, tiene un color determinado, un tamaño, unas características… pero todas las casas albergan una familia que se ama con locura. Siempre me sorprendo de lo complicados de abordar que parecen algunos temas, y lo sencillos de entender que resultan por parte de los niños.
La facilidad con la que Emma explica la diversidad familiar que existe sin caer en estereotipos y la dulzura con la que lo hace, ayuda a entender a los niños que, a pesar de las diferencias y peculiaridades que existen en las distintas personas que forman una familia, hay algo que las iguala por completo, y es el amor que se profesan los miembros que la componen.
Con letra ligada y unas ilustraciones muy frescas y coloridas, Lucía Belinchón da vida a los personajes y las casas que van apareciendo a lo largo del cuento reflejando así no sólo la diversidad familiar, sino también la diversidad étnica y cultural.
Sofia y las familias de sus amigos nos ha dado pie a establecer largas conversaciones con nuestros hijos acerca de la familia, un tema que nos parece fundamental y de suma importancia. Os lo recomiendo por ser una herramienta fantástica para padres y profesores a la hora de explicar otras realidades.
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